Negociaciones de mitad de temporada? Las negociaciones vinieron complicadas para el
NYC United. La mayor parte del plantel solicitó un aumento de sueldo con cifras exorbitantes. El presidente decidió llegar a un acuerdo en común para no desestabilizar la economía del club, lo que ocasionó molestias en muchos jugadores. Finalmente, todos cedieron y se logró firmar los contratos, aunque la cantidad de dinero que el club destina para los sueldos de los jugadores creció notablemente.
? Dada la situación económica que mencioné antes, el club decidió no incorporar a ningún jugador.
? Como hacía falta un delantero,
Federico Marzullo decidió incluír en el equipo a
Ulmonarysky, un joven proveniente del
equipo filial que, según los expertos, se parece mucho a Gonzalo Higuaín.
ResultadosLiga - Serie A Latinoamericana
Terminada la jornada de negociaciones se avecinaba un partido clave:
Cartagena, el firme puntero del campeonato, contra el
NYC United, su perseguidor más cercano. Y el partido se dio de una manera impensada. Cuando todos creyeron que estaban a punto de ver un encuentro parejo y disputado, sorprendimos de entrada y a partir de ahí no paramos. Uno, dos, tres, cuatro tantos para que la punta pasara a ser del equipo de
Marzullo. Un gol del equipo colombiano sólo sirvió para decorar el resultado: goleada por
4-1. Y a partir de allí el equipo no paró de sumar de a tres, a diferencia del
Cartagena, quien sintió fuerte el golpe de la goleada y perdió varios partidos de forma consecutiva, alejándose cada vez más de la punta.
Como mencioné antes, ganamos varios partidos al hilo y cosechamos unos cuantos puntos que nos dieron aire y soledad en la cima del torneo. Sin embargo, en la
fecha 25, antes del partido por la
Champions, se dio un resultado totalmente histórico: con suplentes (en su mayoría chicos provenientes de la cantera) caímos por ¡
8-3! ante el
Palermo Hollywood, en un partido totalmente atípico. Y después de ese encuentro, a jugar por la
UEFA Champions League...
UEFA Champions League
Ningún resultado en el campeonato nos iba a desanimar. El equipo está mentalizado y tiene los objetivos claros. El sorteo indicó que el
NYC United se enfrentaría al
Olympique de Marsella por los octavos de final. Sin duda un rival muy complicado.
Primer partido, en Francia. Salimos decididos a todo, atacamos durante los primeros minutos. Sin embargo, los nervios que generan estas instancias decisivas nos traicionaron y, con algo de fortuna, el
Olympique convirtió el primero. El golpe no se sintió en el equipo de
Marzullo ya que, cinco minutos más tarde, llegamos al empate. Pese a la alegría, decidimos seguir atacando y conseguir más goles que, de visitante, suman mucho. Con convicción fuimos a la ofensiva y el esfuerzo dio sus frutos:
El-Arabi puso el
2-1 para la alegría de la gente. A partir de allí dominamos todo el partido, y hasta pudimos haber ampliado la diferencia, pero fallamos en la definición. "Los goles que no se hacen en un arco, se hacen en el otro", dicen algunos. Y así fue. En el
minuto 92, en la última jugada, un desborde por izquierda, un centro atrás y una definición casi desde el piso hicieron que el equipo francés empatara las cosas. Con mucha bronca, pero sabiendo que el resultado no era tan malo (dos goles de visitante siempre son importantes) empezamos a pensar en la revancha.
Partido de vuelta, en casa. Todas las tácticas y estrategias se desmoronaron a los
6 minutos, cuando un error defensivo le posibilitó a
Malouda convertir el primer tanto. Ahora si, la cosa se complicaba. Pero, otra vez, la reacción del equipo fue inmediata. Tan sólo tres minutos demoramos en empatar. Apareció
Taarabt, tomó un rebote en el área y adentro. El
1-1 nos clasificaba, pero faltaba mucho. A los
17 minutos "el animal"
Ribeiro probó de lejos, la pelota impactó en un defensor y quien tomó el rebote fue
Stilic, quien con un zurdazo excepcional, puso las cosas
2-1.
A los
51 llega un momento clave en el partido. Hubo un avance por izquierda del equipo francés que la defensa no pudo parar y un pase filtrado ante un jugador que apareció sorpresivamente sólo. Era
offside, el jugador estaba adelantado por casi dos metros. El juez de línea levantó la bandera, pero el árbitro dejó seguir la acción. El jugador inhabilitado le pegó al arco y, tras un mínimo rebote en la pierna de
Heycory, que había ido a barrer, la pelota terminó adentro del arco. El juez dio por válido el gol dándolo como autogol del volante del
NYC United. Indignación total en el estadio. Este polémico gol llevaba a los penales.
En lugar de desanimarse, el equipo buscó poner justicia en el marcador. A los
57 minutos apareció
Ribeiro y, con clase, la picó por encima del arquero para poner el
3-2. Aprovechando el ímpetu ganado con el tercer gol, a los
62 minutos,
El-Arabi gambeteó a un defensor y definió cruzado al segundo palo. El
4-2 nos daba algo de tranquilidad pero no estaba nada definido. Tratamos de seguir atacando pero, de contra, el
Olympique encontró el
4-3. Otro desborde por derecha, un centro atrás para
Ayew, que venía sólo, y gol.
De esta forma, un gol cambiaba todo. Con este resultado parcial clasificábamos, pero tan sólo un tanto más del equipo francés nos eliminaba de la copa. Sin embargo, a los
73 minutos,
El-Arabi gambeteó al arquero y anotó para poner las cosas
5-3 y sentenciar el resultado.
Una victoria muy sufrida, una serie muy complicada, pero pasamos. En cuartos de final nos espera el dificilísimo
Manchester City. A seguir sufriendo...