Martes 8 de Agosto de 2006
10:31
DPA
VALENCIA/MADRID.- El Valencia ya no puede disimular más su divorcio con el futbolista Roberto Ayala: el equipo voló hoy sin el argentino hacia la ciudad austríaca de Salzburgo para debutar en la Liga de Campeones, mientras sigue sin definirse el destino definitivo del central para esta temporada.
La situación es insostenible, y el Valencia jugará mañana su partido de la previa de la Liga de Campeones sin Ayala, un jugador histórico del club que pasa por un momento tan delicado como confuso. Es un capítulo más de un desencuentro evidente entre ambas partes, el anuncio previo a la casi segura marcha del central.
Ayala se fue al Mundial de Alemania 2006 con la renovación casi en el bolsillo. Terminaba su contrato con el Valencia al final de la temporada y el club le había ofrecido ampliar su relación. Pero casi sin explicaciones las relaciones se enfriaron, y todo se complicó.
En el desencuentro cumple un papel el controvertido Gustavo Mascardi, su representante. Mascardi es también el apoderado del argentino Pablo Aimar, quien hace un par de semanas dejó el Valencia para firmar por el Zaragoza. Las relaciones de Mascardi con el Valencia son pésimas.
El viernes se vivió el capítulo más desagradable, cuando un grupo de hinchas radicales acudieron al entrenamiento del equipo en la Ciudad Deportiva del Valencia y pusieron una pancarta en la que se leía "Ayala mercenario".
Quique Sánchez Flores, el técnico del equipo, se acercó a ellos y pidió a los hinchas que retiraran la pancarta, aunque sin tiempo de impedir que Ayala se acercara para insultar a los aficionados. El entrenador alejó al jugador del lugar casi a rastras.
Poco antes, Mascardi anunció que su representado tenía una oferta del Villarreal, enemigo regional del Valencia, y que su deseo era fichar por los amarillos. El Valencia aún no se pronunció, pero el público no perdona la "traición".
Tras los incidentes Ayala voló a Argentina con permiso del club, que estudia cómo quitarse de encima un problema importante. El jugador quiere irse al Villarreal, que no quiere pagar casi dinero por un futbolista al que podría tener gratis en julio.
De hecho, las últimas informacionres aseguran que el Valencia sólo estaría dispuesto a dejar ir al futbolista a un club no español, una posibilidad a la que se niega rotundamente Mascardi, que sólo tiene ojos para el Villarreal.
"El Valencia es un club comprador, no vendedor, por eso no vamos a vender un jugador nuestro a un equipo que luego nos puede complicar el acceso a la Liga de Campeones. No es conveniente reforzar a un rival", argumenta Amedeo Carboni, director deportivo del Valencia y compañero de Ayala en el vestuario hasta la pasada temporada.
Entretanto, el silencio del futbolista sólo alimenta la intranquilidad. El Valencia filtró que Ayala tiene estipulado en su contrato que debe permanecer callado en asuntos contractuales, para los cuales sólo Mascardi tiene voz. Todo un enredo para un jugador mundialista que hoy por hoy no sabe dónde jugará la próxima temporada, que ya comienza.
emol.com